DERIVADOS DE CANNABIS COMO SUPLEMENTO DIETARIO PARA MASCOTAS
(HUMBERTO TORRES LLERENA)
Se considera un suplemento dietario el producto que, incorporado a una dieta normal, suministra fuentes nutricionales que van desde vitaminas, proteínas, aminoácidos, minerales, fibra, hasta los componentes que pueden estar contenidos en concentrados de plantas o sus extractos, este último, es el caso de los extractos de cannabis que bien pueden utilizarse de esta manera, siempre que contengan altas concentraciones de CBD y bajo contenido de THC.
El aceite de CBD puede ser utilizado como suplemento dietario tanto en humanos como en animales de compañía garantizando concentración muy baja de THC, menores al 0.2 %, lo que asegura que no se presenten efectos adversos incomodos producto de la acción psicotrópica del THC, que para caninos y felinos son bastante notorios, uno de ellos es la desorientación, con signos clínicos atáxicos.
El CBD como suplemento dietario para mascotas, juega un papel preponderante en el control de las enfermedades inflamatorias gastrointestinales, especialmente cuando el extracto es de alto contenido en CBD y bajo en THC en relación (4:1), lo que proporciona una adecuada asimilación de los suministros alimentarios a mascotas, en razón al control de estas patologías que influyen significativamente en una adecuada nutrición de los animales. En animales de compañía el suministro de estos suplementos dietarios debe estar ordenado y vigilado por un médico veterinario a través de la consulta, ya que el uso de algunos medicamentos para el tratamiento de ciertas enfermedades con el consumo concomitantes de estos suplementos puede generar interacciones medicamentosas que terminan en cuadros de reacciones adversas. CONCOMITANTE
En la matriz de extracción del proceso de obtención de los derivados del cannabis, convergen muchos compuestos químicos entre los que podemos mencionar: cannabinoides, terpenos, flavonoide, vitaminas, proteínas, ácidos grasos insaturados, siendo todos estos componentes los que conforman el llamado extracto full espectro. Una vez obtenido el extracto full espectro su composición puede ser modificada mediante procesos de purificación y acondicionamientos a través de diluciones, lo que facilita alcanzar concentraciones de THC por debajo del 0.2 %, este proceso genera finalmente un producto que bien puede ser utilizado como suplemento dietario para mascotas.
La semilla de cáñamo (Cannabis sativa l) se emplea como una fuente importante de alimentos, caracterizándose por sus componentes nutricionales con un 25% de proteína con contenido de todos los aminoácidos esenciales (triptófano, treonina, valina, lisina, leucina, metionina, histidina, isoleucina y fenilalanina), 31% de grasas, 34% de carbohidratos, 75-80% de ácidos grasos poliinsaturados, vitaminas y minerales.
El aceite de semilla de cáñamo presenta el mayor contenido de compuestos fenólicos en comparación con todos los otros aceites de origen vegetal, por lo que la inclusión de este aceite como suplemento dietario para mascotas debe tener especial cuidado con los contenidos de estos compuestos, específicamente cuando el suplemento va dirigido a felinos, por lo susceptible que pueden ser estos animales al desarrollo de hepatotoxicidad.
Los suplementos dietarios en su elaboración están sometidos a unas exigencias rigurosas contenidas en el Decreto 3863 del 2 de octubre de2008, exigencias que contemplan aspectos técnicos relacionados con la composición cualitativa y cuantitativa del suplemento dietario en cuanto a la cantidad máxima permitida de vitaminas, minerales y oligoelementos de consumo diario tolerable, con ausencia total de hormonas, residuos de plaguicidas, antibióticos, medicamentos veterinarios, metales pesados, entre otros. Así mismo, no está permitido incluir sustancias estupefacientes, psicotrópicas o que generen dependencia, es por esto que el contenido de THC en los derivados de cannabis que se incorporen a la dieta de mascotas debe estar por debajo de 0.2%, sin dejar de lado las exigencias que demanda la obtención del certificado de Buenas Prácticas de Manufactura – BPM, lo que involucra normas de estricto cumplimiento, así como todo lo que demanda el registro sanitario que otorga el INVIMA contemplado en este decreto y que para este tipo de productos no es la excepción.
BIBLIOGRAFÍA
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